Espacios Comunes de Holly Jungle
La arquitectura se disuelve entre los árboles, dialogando con la tierra, la luz y el agua. Los espacios comunes no se imponen: emergen como extensiones naturales del entorno, respirando al ritmo del bosque.
Bajo estructuras curvas de caña y materiales naturales, se despliegan áreas semicubiertas que invitan a la contemplación, al encuentro y al descanso.
Los caminos guían a los visitantes en un recorrido sensorial, donde cada curva revela una nueva perspectiva del paisaje.


Sus formas orgánicas evocan raíces y ramas, generando espacios que fluyen, se entrelazan y se abren al cielo.
Cada rincón de los espacios comunes —plataformas de descanso, pabellones, senderos y puntos de reunión— fue concebido como un refugio para la memoria y la vida compartida, un lugar donde la materia se vuelve espiritualidad, y donde la naturaleza es la verdadera protagonista.
En Holly Jungle, la comunión entre el alma, la arquitectura y el paisaje da forma a un entorno que no solo se recorre, sino que se siente y se recuerda.









































